La Palabra me dice
El relato de la Transfiguración tiene el trasfondo del Getsemaní, y viceversa. Los discípulos son los mismos, y el contexto de la muerte de Jesús aparece en los dos episodios. Además, en los dos, y seguramente lo más importante, es la oración de Jesús: en la Transfiguración, lleno de gloria, y en Getsemaní, sudando sangre. La oración de Jesús en la Transfiguración tiene la importancia de que es un diálogo con la Palabra de Dios, significada en las personas de Moisés y Elías, el gran legislador y el gran profeta. Y en ese diálogo con la Palabra, Jesús habla de su muerte que se cumplirá en Jerusalén. Jesús dialoga con la Palabra sobre aquella situación que angustia su corazón, y en su transformación, el volverse deslumbrante, muestra la paz que encuentra para afrontar la situación. Y el relato culmina con una invitación para los discípulos, Pedro, Juan y Santiago, y también para los discípulos de hoy, que somos nosotros: Dios Padre reconoce a Jesús como su Hijo Elegido, y pide que lo escuchemos. En definitiva, nos dice que también nosotros debemos dialogar con la Palabra nuestras dificultades y situaciones difíciles. |