La Palabra me dice
Estando ya resucitado, Cristo se aparece una y otra vez a algunos de sus discípulos. Al ir a contarle al resto que habían visto al Señor, nadie creyó. El texto termina con un mandato del propio Jesús, diciendo “vayan por todo el mundo, anuncien la Buena Noticia a toda la creación”. Pareciera impensado que los propios discípulos, es decir, quienes compartían el día a día con Jesús, no pudieran reconocerlo estando Resucitado. Si pensamos en los días que corren, sabemos que únicamente tiene dificultades de reconocer a alguien aquella persona que sufre problemas de memoria; pero en el Evangelio son varios los que no pueden reconocer a Cristo, lo que nos da la pauta de que el reconocimiento del Resucitado no es una cuestión de buena o mala memoria, sino que es una cuestión que pasa por otro lado. En otras palabras, aquel que no reconoció a Cristo resucitado, es aquellos que “no creyeron”. |