La Palabra me dice
Se reagrupan aquí varios dichos de Jesús enunciados en diversas circunstancias. Son palabras polémicas con sus adversarios que le cuestionaban su modo de vivir y el modo de cumplir su misión. Jesús pone de relieve que el sentido de esa misión se revelará en la intimidad de cada persona, iluminada por el Padre. Pero si el corazón se endurece, es difícil que después se enmiende el camino. Jesús elogia a Juan Bautista, que señala en modo iluminante el verdadero rumbo: él prepara el camino al Mesías: su misión es ésa, preparar lo que hará el Señor. Jesús estigmatiza a sus adversarios que acaban por rechazar a ambos: a Juan que prepara a recibir al Mesías, y luego al mismo Jesús. Así puede entenderse también la “violencia” que sufre el Reino de Dios, porque los “violentos” (los contrarios al Reino), quieren imponerse y dominarlo, sin dejar a otros que desean entrar. |