La Palabra me dice
“Es inevitable que haya escándalo”: Jesús mismo sabe cómo muchas veces los malos entendidos, las distintas posiciones y opciones, pueden generar escándalos. Sin embargo, él no condena el escándalo, sino a aquél quien lo ocasiona, por así decir, intencionalmente, ya que posee el deseo de generar pelea, enojos y divisiones en una comunidad que busca llevar la Buena Noticia, como la comunidad de sus discípulos. El evangelio también nos invita a reprender y perdonar: “reprender” no como castigo o con intención de juzgar, sino de reprender con palabras cargadas de sentido, cuidado y amor para que el accionar de próximas veces sea desde Dios y con Dios. “Perdonar”: el Señor es claro a la hora de pedirnos que sepamos perdonar a nuestro hermano arrepentido. El perdón es el gran gesto de amor que vuelve a dar confianza y esperanza. ¿Cómo no perdonar a alguien cuando se encuentra realmente arrepentido? Estamos todos invitados a llevar la esperanza y la confianza, a llevar el perdón. |